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Día Mundial del Agua - Reflexiones sobre nuestra valoración del agua y su verdadero valor

El Día Mundial del Agua se celebra cada 22 de marzo para recordar la relevancia de este líquido esencial. En este 2021 se busca evidenciar la crisis mundial del agua y analizar lo que significa el agua para las personas, su verdadero valor y cómo podemos proteger mejor este recurso vital. En esta nota, docentes investigadores de la FCA, especialistas en la temática, comparten sus reflexiones al respecto.

22 de marzo de 2021, 11:24.

imagen Día Mundial del Agua - Reflexiones sobre nuestra valoración del agua y su verdadero valor

El Día Mundial del Agua fue proclamado por la ONU en 1992. En esta celebración 2021 se busca concienciar acerca de la crisis mundial del agua y la necesidad de buscar medidas para abordarla de manera que alcancemos el Objetivo de Desarrollo Sostenible No 6: Agua y saneamiento para todos antes de 2030. Además, este año el Día Mundial del Agua trata de lo que significa el agua para las personas, su verdadero valor y cómo podemos proteger mejor este recurso vital. 

Nuestra Facultad de Ciencias Agrarias históricamente trabaja en la enseñanza y valoración de este preciado recurso. Por eso en esta fecha tan especial, docentes investigadores de la FCA, especialistas en la temática, nos comparten reflexiones al respecto:

 

Prof. Carlos Schilardi, Cátedra de Riego y Drenaje, FCA, UNCUYO

El agua es vida, es futuro; es la sustancia más impresionante de nuestro planeta; porque reta todas las leyes de la física. El agua sin dudas es la sangre de nuestro planeta vivo donde todo está interconectado gracias a ella. En los hogares, centros de estudio y trabajo, el agua es salud, higiene, dignidad y productividad. En lugares culturales, religiosos y/o espirituales el agua es creación, comunidad y uno mismo, aportando su esencia a la cosmovisión del universo entero.

En el medio ambiente el agua representa paz, armonía y conservación. Nuestra provincia es ejemplo de trabajo firme y responsable en la productividad de los recursos hídricos. Los sistemas de riego adecuadamente diseñados, operados y mantenidos; permiten un uso racional y sostenible del agua en la agricultura, que se presenta como el mayor usuario del agua. 

Hoy el agua se encuentra en amenaza extrema por una población en crecimiento exponencial y por la demanda creciente de los distintos usuarios (agricultura, industria y zonas urbanas), además de sufrir los abates del cambio del clima a nivel global impactando de diferente forma en el ciclo hidrológico de cada región de nuestro planeta.

Hoy es un día de celebración y concientización de todas las diferentes formas en que el agua beneficia nuestras vidas y la de todos los seres vivos, como así también del lugar donde vivimos. No olvidemos que el ciclo del agua y el ciclo de la vida es uno mismo. ¡Feliz Día Mundial del Agua!

 

Prof. Daniela Consoli, Cátedra de Química Agrícola, FCA, UNCUYO

El agua, recurso primordial e insustituible, es limitante para el desarrollo de una región árida como la de nuestra provincia. Pero la limitación no se refiere sólo a la cantidad sino a la calidad del recurso. La calidad es un concepto referido a la satisfacción del fin, que debe considerar el uso que se le pretende dar, siendo importante, desde el punto de vista del aprovechamiento sostenible del recurso, conocer su composición y su dinámica espacial-temporal para asegurar la preservación del recurso.

La gestión hídrica, cada vez es más compleja, debe considerar el cambio climático, el ordenamiento territorial, la eficiencia agronómica, las posibilidades de reuso, el control de contaminantes, las políticas hídricas, el recurso económico, las prioridades de uso establecidas en la ley de aguas y las demandas crecientes que compiten por este recurso. Siendo la agricultura la actividad que demanda su mayor consumo, es un desafío creciente maximizar factores de producción con el fin utilizar la menor cantidad y calidad de agua para dejar mayor disponibilidad para otros fines. 

El control y resguardo de la calidad de agua es indispensable e incumbe a distintos ámbitos como Gobierno, universidades, institutos de investigación, asociaciones de usuarios y  a la población en general, promoviendo la educación y concientización social hídrica.

 

Prof. Paula Mussetta, Cátedra de Formación General y Extensión Rural, FCA, UNCUYO

Si hablamos de la relación de la sociedad con el agua, Mendoza tiene una una cultura del agua histórica y consolidada. Esta cultura fue construida sobre las ideas del progreso, del desarrollo, de la modernidad de finales del siglo XIX, junto a la idea de conquistar el desierto y convertirlo en un vergel, en un oasis. Así, la cultura de los oasis se concentra en cuidar, defender y proteger las fuentes de agua. Esa cultura del agua es la que históricamente convirtió a Mendoza en lo que es hoy. 

Ahora bien, la cultura del agua en Mendoza no siempre permitió dar otras discusiones sobre aspectos que tienen más que ver con la sustentabilidad del agua como el ahorro, el reuso, la eficiencia, el cuidado en el uso, aspectos más relativos a la demanda de agua, no sólo a su oferta. Por lo tanto, el desafío de la cultura del agua continúa siendo lograr que como sociedad seamos más sensibles a los temas ambientales o sustentables del agua.

En la actualidad la pandemia nos está mostrando una faceta de las relaciones sociedad-naturaleza que no teníamos completamente internalizada. Hoy podemos comprender, de forma evidente, que la lucha por la preservación de los ecosistemas y de sus recursos esenciales como el agua, tiene que ver con nuestra propia supervivencia como humanidad. Esperemos no dejar pasar esta oportunidad única.

 

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